Detectores ultrasónicos de fugas de gas
Detectores ultrasónicos de fugas de gas
La detección ultrasónica de las fugas de gas utiliza sensores acústicos para identificar fluctuaciones de ruido que son imperceptibles para el oído humano dentro de un entorno de proceso. El sensor y la electrónica pueden detectar estas frecuencias ultrasónicas (entre 25 y 100 KHz), a la vez que excluyen las frecuencias audibles (entre 0 y 25KHz). A diferencia de los detectores de gas tradicionales que miden el gas acumulado, los detectores ultrasónicos de gas “escuchan” la fuga y activan un sistema de advertencia temprana.
Los sensores responden al sonido generado por los escapes de gas en frecuencias de ultrasonido. La velocidad de la fuga de gas depende principalmente de su tamaño y de la presión del gas. En la mayoría de las plantas, la mayor parte del ruido del proceso está en un rango audible, mientras que solo se genera un ruido de ultrasonido limitado durante la operación normal. Las emisiones de gas altamente presurizado producen un ultrasonido (25-100 kHz) que los sensores de ultrasonido pueden detectar pese a la presencia de ruido audible.
Las tecnologías de detección por ultrasonido más recientes utilizan un sensor resonante, a diferencia de la tecnología tradicional que utiliza un diafragma (micrófono) metálico en movimiento. El elemento del sensor activo es un material piezoeléctrico (que convierte la deformación mecánica en voltaje eléctrico) incrustado en un medio cerámico. Los sensores tienen una resistencia química extremadamente alta y una banda de respuesta de rango de frecuencias amplia. El detector de fugas de gas por ultrasonido se puede montar en cualquier orientación. Su diseño no tiene piezas móviles, por lo que se elimina por completo el desgaste.
El detector de fugas de gas por ultrasonido Rosemount Incus está equipado con cuatro de estos sensores piezoeléctricos que cubren un rango de radio máximo de 40 m (131,2 ft) desde el detector. Cada detector de fugas de gas por ultrasonido sale de fábrica calibrado de por vida y nunca vence. No se requiere puesta a cero ni calibración, ni elementos del sensor consuntivos que reemplazar, nunca.
La tecnología de detección por ultrasonido de fugas de gas monitoriza constantemente áreas amplias con sensores acústicos avanzados especialmente ajustados al proceso emitido por las fugas de gas presurizadas. Los detectores de fugas de gas por ultrasonido no esperan hasta que se haya acumulado una concentración de gas peligrosa o la nube de gas haya hecho contacto físico con un sensor de gas. El tiempo de respuesta es instantáneo para todos los tipos de gas. Dado que los detectores de fugas de gas por ultrasonido son inmunes al envenenamiento, nunca requieren calibración de campo y todas las fuentes intermitentes de ruidos por ultrasonido de fondo pueden ignorarse con la configuración de retardo de tiempo.